El gobierno de Nicaragua afirma que el obispo Rolando Álvarez, encarcelado desde hace más de 500 días y condenado ilegalmente a 26 años y 4 meses de prisión, se encuentra en buen estado de salud.
El martes 2 de enero fue publicada una breve nota de prensa en donde se informa que, durante los 15 minutos de revisión médica, el obispo expresó sentirse bien y aseguró que se mantiene realizando ejercicio.
Además, fueron difundidas algunas imágenes en donde se observa a Mons. Rolando visiblemente delgado, lo cual nuevamente ha levantado sospechas sobre su salud, el prolongado aislamiento que ha vivido y las condiciones de su encarcelamiento.
Reacciones internacionales
Detractores del régimen sandinista han calificado estas imágenes como propaganda política y puesta en escena.