Cedegua es la comuna de Chile ubicada en la región del Libertador General Bernardo O’Higgins (zona central y a pocos kilómetros de la ciudad Rancagua) donde los fieles locales acaban de tener un momento de gran alegría.
Es que luego de 13 años del famoso terremoto del 27 de febrero de 2010 (conocido como 27F y que alcanzó una magnitud de 8.8 dejando centenares de víctimas fatales y millones de damnificados), un templo que se vio fuertemente afectado en aquel entonces finalmente ha podido ser restaurado.
Monumento histórico
Se trata de la iglesia Nuestra Señora de la Merced, lugar religioso en una diócesis donde la huella de la presencia mercedaria se hace más que latente. Efectivamente, tal cual se recuerda desde el Consejo de Monumentos Nacionales de Chile, la parroquia de Codegua es una de las más antiguas de la zona, fundada en 1824.
En cuanto a datos históricos, se recuerda que la ejecución de este templo se dio entre 1850 y 1856 y que originalmente «consistía en una nave rectangular dividida en coro y sotocoro, presbiterio y nave, acompañadas de dos capillas laterales que formaban una cruz latina».
En ese sentido, una de las partes más destacadas del templo es la torre campanario, además de la conexión con la casa parroquial a manera de claustro.
Las particularidades de este templo llevaron a que el 27 de enero de 2009, mediante un decreto, fuera declarado monumento nacional de Chile en la categoría de monumento histórico.
La tan anhelada restauración
Chile está posicionado entre los países con mayor actividad telúrica del planeta, algo que hace que tenga eventos en su historia de gran envergadura vinculados a terremotos. Con ello la destrucción y afectación de sitios como las iglesias.
En efecto, la iglesia de la Merced antes de lo sucedido en 2010 ya había sido sacudida por otro terremoto (1985), algo que posteriormente también fue arreglado. Sin embargo, lo ocurrido en la última ocasión –que dejó a esa iglesia inutilizable- generó gran tristeza y conmoción.
Pero todo eso llegó a su fin el 26 de junio cuando el obispo diocesano, monseñor Guillermo Vera, bendijo el nuevo edificio, tal cual recuerda la Iglesia de Chile.
Según la crónica, «autoridades comunales y regionales, sacerdotes y diáconos, además de gran cantidad de fieles, a pesar de las malas condiciones climáticas, llegaron a participar de la ceremonia de bendición del templo».
La reconstrucción de este sitio de gran valor arquitectónico y patrimonial se pudo dar gracias al aporte del Estado.
«Esta parroquia es de todos los chilenos», expresó en más de una oportunidad su párroco, el padre Héctor Durán.
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Consagración a Nuestra Señora de la Merced
«Tras años de insistencia y trabajo, el viernes 20 de mayo se dio un paso más, pues la empresa constructora entregó las obras al Gobernador Pablo Silva Amaya, quien -a su vez- hizo entrega del templo a nuestro obispo diocesano Guillermo Vera. Y a pesar de que aún faltan detalles se quiso realizar la apertura a la comunidad este lunes 26 de junio», agregó la Iglesia de Chile.
En tanto, también se recordó que en la misa esta edificación fue consagrada a Nuestra Señora de la Merced, además de las referencias a la inmensa alegría que representa para los fieles poder «volver a vivir su fe en su casa».
