Por la mañana, el Papa, que ya pasó cinco noches en el policlínico Gemelli -al noroeste de Roma-, recibió la Eucaristía y luego se dedicó al trabajo, dijo Matteo Bruni. El mismo día, el jefe de la Iglesia Católica también aceptó dos renuncias y nombró un nuevo arzobispo para la diócesis de Madrid.
El equipo médico que sigue al Papa Francisco indica que el pontífice “sigue comiendo con normalidad”. Después de la cirugía, el Papa se sometió a una dieta de agua y luego de semiagua durante dos días. Ayer domingo compartió su almuerzo con quienes lo rodeaban en el hospital.
Durante una rueda de prensa el 10 de junio, el cirujano Sergio Alfieri explicó que si bien una operación de este tipo suele requerir 4 o 5 días de hospitalización, el equipo médico había pedido al Papa Francisco que se quedara en el Gemelli “al menos toda la próxima semana”, como una medida cautelar.
Si bien las audiencias papales están oficialmente canceladas hasta el 18 de junio, el profesor Alfieri no descartó, sin embargo, que el pontífice pueda salir antes.
