La Conferencia Episcopal Boliviana rompió el silencio este 3 de mayo y emitió un comunicado sobre la denuncia suscitada recientemente por el periódico español El País donde se hace referencia al caso de pederastia que involucra al sacerdote español jesuita Alfredo Pedrajas, fallecido en 2009, quien durante varios años vivió en Bolivia.
La publicación del medio español, que presenta una investigación con testimonios de víctimas allegados a Pedrajas –quien durante su vida sacerdotal estuvo también en otros países latinoamericanos como Ecuador y Perú-, deja de manifiesto abusos a decenas de niños y adolescentes bolivianos.
«Tolerancia cero» y prevención
De manera inmediata, la situación generada a raíz de este trabajo periodístico sacudió a Bolivia y la Iglesia recordó que «toda denuncia es investigada por el Dicasterio para la Doctrina de la fe, a través de la instancia a la que pertenece el denunciado, en este caso la Compañía de Jesús».
«La Iglesia Católica, desde el Papa Francisco, ha comprometido “tolerancia cero” frente a los abusos sexuales de menores de edad y personas vulnerables, así como trabajar decididamente en la PREVENCIÓN, creando ambientes seguros, que eviten que sigan ocurriendo casos, dentro y fuera de la Iglesia», prosiguió la Iglesia.
«Pedimos perdón»
«Como Iglesia condenamos estas acciones, nos solidarizamos con las víctimas que han sufrido hechos de abuso sexual, les pedimos perdón, y les manifestamos que compartimos su sufrimiento y decepción por estos graves hechos que han marcado sus vidas y han sido causa de profundo dolor. Nos comprometemos a brindarles apoyo, reafirmando nuestro compromiso fraterno de escucha y acompañamiento», estableció la Iglesia boliviana.
Por último, añadió: «Comprometemos nuestros buenos oficios para que la investigación se lleve en el marco de la transparencia e imparcialidad, esperando que el tema no se politice, como hemos visto que sucedió en algunas declaraciones sobre el tema».
Jesuitas también repudiaron hechos y tomaron medidas
Quienes también se manifestaron en primera instancia a raíz de las denuncias presentadas sobre Pedrajas fueron los propios jesuitas en Bolivia. Lo hicieron a través de comunicados y una rueda de prensa.
«La Compañía de Jesús de Bolivia repudia y condena estos hechos de pederastia denunciados públicamente, relacionados con el caso del sacerdote español Alfonso Pedrajas, fallecido en 2009», expresaron en el último comunicado publicado el 2 de mayo.
A propósito de las denuncias sobre abusos sexuales del sacerdote español fallecido, los jesuitas bolivianos también han decidido suspender de sus actividades a los religiosos de esa congregación que fueron provinciales de la época de la que datan los abusos para realizar una investigación sobre sus actuaciones en el caso.
«Asimismo, ha resuelto suspender de sus actividades a otros jesuitas que ejercieron como Provinciales en los años posteriores al fallecimiento de Pedrajas para investigar sobre si hubo denuncias públicas no atendidas en su momento», indicaron los jesuitas bolivianos.
Colaboración, investigación y también perdón
Finalmente, al igual que lo hizo la Iglesia boliviana, los jesuitas subrayaron su política de «tolerancia cero» ante los abusos, al igual que su disposición a «colaborar con las autoridades competentes que lo requieran sobre estas investigaciones».
«Los abusos han provocado una herida profunda en las víctimas y las denuncias no pueden ser ignoradas, aunque el sacerdote involucrado en los hechos haya fallecido», indicaron.
«Reiteramos nuestra decisión de investigar los casos con una comisión de peritos que está actuando desde el 2022, lo que puede crear una esperanza de Justicia para las víctimas, cuya situación nos ha avergonzado y causado indignación y tristeza. Pedimos perdón por el dolor causado», finalizaron los jesuitas bolivianos.
