Aleteia logoAleteia logoAleteia
sábado 21 diciembre |
Aleteia logo
Historias que inspiran
separateurCreated with Sketch.

Hacía desayunos en familia: acaba de inventar la Nespresso de pasteles

tigout-RODRIGO-CORDOBA.jpg

Tigoût.

Un coulant elaborado con la nueva máquina que ha inventado Rodrigo Córdoba.

María José García Crespo - publicado el 12/11/22

Esta es la historia de un argentino que vendía cascos y complementos de motocicleta, pero que nunca montó en una. Tampoco había tomado café en casa hasta que se inventó la Nespresso. Tiene nombre épico, Rodrigo Córdoba, así que, haciendo honor a su nombre, esta historia no es menos épica que su protagonista

Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.

Deseo donar en 3 clics

Todo comenzó cuando Rodrigo vendió su empresa. Se apuntó con sus cuatro hijos mayores -el quinto sólo tiene 4 años- a cursos de cocina. Durante el fin de semana mostraban lo que había aprendido cada uno. Así nació este plan familiar “súper divertido”: que cada uno preparase su pastel favorito, cuenta Rodrigo.

Así es este plan, cocinar desayunos de alta repostería a la carta. Se arman con el delantal y se ponen con las manos en la masa para degustar sus pasteles favoritos. Seguro que usted es capaz de visualizar la alegría y el buen ambiente de estos “cocinillas”. Y, en efecto, también es capaz de imaginar cómo quedaba luego la cocina.

El matrimonio se pasaba cuatro horas limpiando cacharros, bandejas, utensilios varios… vamos, lo que sería la trastienda de Masterchef.

Corre el mes de abril de 2016. Un día, mientras estaban en plena creación culinaria, los ojos de Rodrigo se pararon en la Nespresso. ¡Eureka! La idea se iba formando en su mente inquieta. ¿Sería posible crear una “nespresso” para alta repostería? ¿Una cápsula de pastel? ¿Que se cocinasen en menos de 10 minutos?, ¿no tener que limpiar una cocina sucia como si hubiese pasado el demonio de Tasmania?

De plan familiar a empresa

“Nuestros desayunos y meriendas parecían los de un hotel cinco estrellas: cheescake, applecramble, scons, panqueque, cookies… Llegaban los amigos de la familia y en dos minutos desaparecía toda la repostería”.

“¡Cómo le gusta esto a la gente! -pensó Rodrigo- pero a las personas no les gusta cocinar o no tienen tiempo para hacerlo”.

Entonces fue el momento Eureka: por qué no fabricar una maquinita en la que pongas una cápsula de repostería y así no se monta semejante lío en la cocina. Así surgió la idea en 2016.

¿Una locura?

Empezó a escuchar la opinión de profesores que había conocido en un curso de dirección impartido por la escuela de negocios IAE Business School, amigos que habían estudiado marketing, etc.

A unos les parecía una idea original y simpática que podía funcionar. Otros pensaron que era una locura, que no podría funcionar. Mantuvo muchas reuniones en las que le daban consejos. Recuerda uno en especial, cuando un profesor le dijo que necesitaba un ingeniero en alimentos. “¿Ingeniero de qué? No sabía que existían”.

A partir de ahí, pensó qué perfiles necesitaba porque no tenía experiencia en este sentido y montó el equipo: pasteleros, ingenieros en alimentos, mecánicos, industriales, eléctricos, una empresa especializada en la fabricación de cápsulas, especialistas en branding y marketing… En Nespresso también le brindaron algunos consejos.

En agosto de 2016 comenzó la aventura. Invirtió todo el capital procedente de su anterior empresa. Tigoût, el nombre de la empresa, es la abreviatura de petit goût, pequeños gustos, en francés.

View this post on Instagram

A post shared by Tigoût My Pastry Chef (@tigout.es)

De 2016 en adelante nos cuenta que pasaron las de Caín. Diseñaron el primer prototipo en 2018, el segundo en 2019 y en enero de 2020 cerró un acuerdo de producción de máquinas con una empresa argentina y el acuerdo de preventa con una empresa alemana. Llega el covid, que provoca que la última fase de desarrollo y producción de las máquinas se retrase un año.

En este momento, “el Banco Central de Argentina publica una normativa por la cual el proveedor de máquinas no podía pagarme, no podía girar divisas al exterior”.

El plan B: emigrar

Rodrigo tuvo que cambiar la estrategia. En lugar de lanzar el producto en Argentina deciden desplazarse a España, con toda la maquinaria, la línea de producción y las primeras 150.000 cápsulas ya fabricadas. El producto era tan novedoso que la aduana española no sabía qué documentación exacta debía solicitar.

“Sufrí durante esos tres o cuatro meses, sin saber qué nos pedirían“.

Su mujer piensa: “Es una gran idea y una gran locura”.

Como inversor fue invitado por el ICEX España Exportación e Inversiones. Viajó a España para sólo tres semanas, que se convirtieron en cuatro meses debido al cierre de fronteras de Argentina a causa de las medidas anticovid.  Finalmente decidió, junto a su esposa y familia, ir a vivir a España.

En medio de todo, se añade el ingrediente de buscar colegios, universidades, vivienda… “Saltamos el charco y, en lugar de hacer las Américas, como se decía antes, hemos hecho la Europa“, bromea.

Con todo ello, se añade la adaptación cultural: “Hablamos el mismo idioma, pero no el mismo lenguaje”, subraya.

La Tigoût democratiza la alta repostería

Ha sobrevivido para contarlo. En la actualidad, la Tigoût hace pastelería gourmet, recetas de pasteleros de hoteles de cinco estrellas, de excelente calidad, sin aditivos ni conservantes. Coulant de chocolate, de dulce de leche -no podía faltar siendo argentino-, un pastel salado de queso, scon típico británico, chocolate negro con nueces y cacao, chocolate blanco, coco, pistachos…

“Son productos muy ricos que a la gente le encantan y que normalmente no cocinamos en casa”, comenta Rodrigo. “Millones de personas pueden disfrutar de la alta pastelería. Agasajar a las visitas y a los clientes con Tigoût y quedar de lujo”.

Sólo toma cuatro o nueve minutos tener preparado un pastelillo. Dependiendo de la receta, se puede disfrutar de un pastel gourmet sin ensuciar la cocina.

La empresa va creciendo poco a poco. La línea de producción está en Osuna (Sevilla), en el sur de España.

De momento venden por internet en España península y Baleares, en Argentina y, en breve, estarán en Portugal y Uruguay.

La máquina ofrece el aliciente de que se conecta con la nube, lo que permite actualizar las recetas.

“Mi sueño es que haya una Tigoût al lado de cada máquina de café alrededor del mundo, en los hogares, las empresas, los hoteles…”.

Ahora están en ronda de inversión. Es una lucha titánica debido a la situación mundial actual: inflación, guerra… es una carrera de resistencia.

Pero, ¿qué son estos obstáculos para el ya mítico Rodrigo Córdoba?

Tags:
creatividaddesempleoempresainmigrantesmujer trabajadoratrabajo
Aleteia vive gracias a sus donaciones

Permítenos continuar nuestra misión de compartir información cristiana y bellas historias apoyándonos.

ES_NEW.gif
Top 10
Ver más
Newsletter
Recibe gratis Aleteia.