Un encuentro, sonrisas y una foto. Hasta aquí nada llamativo. Pues el gesto de tomarse una foto de manera espontánea –sin grandes preparativos- se ha transformado en los últimos años en una de las maneras más cotidianas de confirmar que un momento del presente es considerado especial.
Algo así fue lo que sucedió recientemente con una imagen compartida en las redes sociales en Uruguayy que no tardó en generar repercusiones.
¿Qué tenemos en común?
Es que se trata de una foto que esconde algunas particularidades y los protagonistas son los obispos de Uruguay Arturo Fajardo (Salto), Pablo Galimberti (emérito de Salto) y Fabián Antúnez (de nacionalidad argentina y actual obispo de San José).
Sin embargo, no solamente el hecho de que los tres sean obispos es lo que hace que la foto sea especial. Pues detrás de esta imagen hay una especie de “entramado” que vale la pena conocer. En efecto, Fajardo (izquierda de la imagen con gafas) es el actual obispo de Salto, pero entre 2006 y 2020 fue el obispo de San José.
Por otra parte, quien aparece en el medio (canoso) es el obispo emérito de Salto, Galimberti (fue titular de esas diócesis entre 2006 y 2020). No obstante, al igual que Fajardo, también llegó a ser obispo de San José entre 1984 y 2006.
Por último, a la derecha de la imagen, Antúnez,el actual obispo de San José de Mayo, nombrado por el papa Francisco a la edad de 52 años en 2021, quien se encontró con quienes también fueran obispos de San José nada más ni nada menos que en Salto (ambas localidades uruguayas están separadas por poco más de 300 kilómetros).
“Fotón, Dios los bendiga”, fueron algunas de las palabras que retumbaron en redes. ¿Será Antúnez el futuro obispo de Salto? Las bromas tampoco tardaron en llegar.
He aquí entonces una mezcla entreverada, pero divertida que supo quedar registrada y así resumida por la diócesis de San José de Mayo en redes sociales:
Obispos muy queridos en Uruguay
Fajardo es el actual presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU) y ya con larga trayectoria ocupando diversos roles dentro de la Iglesia. Nacido el 17 de julio de 1961 en Aiguá (Maldonado), ingresó el Seminario Mayor Interdiocesano Cristo Rey en febrero de 1981. Cursó filosofía y teología en el instituto teológico Monseñor Mariano Soler de Montevideo y fue ordenado sacerdote el 8 de mayo de 1988 por el papa Juan Pablo II en la ciudad de Florida. (Puedes conocer más sobre su vida aquí a través de una reseña de la diócesis de San José).
En cuanto a Galimberti, el cariño a este obispo uruguayo, también con extensa trayectoria, siempre se hizo latente. Nacido el 8 de mayo de 1941 (curiosamente, salvo la distancia del año, también el mismo día y mes de la ordenación sacerdotal de Fajardo), Galimberti llegó a estudiar en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma entre 1965 y 1969, obteniendo la licenciatura en teología dogmática. Tuvo un pasaje como diácono en Saint Louis, Missouri (Estados Unidos). Tras su regreso a Uruguay fue ordenado sacerdote el 29 de mayo de 1971.
“Se vincula a la Institución Dalmanutá, asociación de fieles dedicada a la dirección espiritual, fundada en 1980 por el jesuita Luis Pedro Montes y Ernesto Popelka. El 12 de diciembre de 1983 fue nombrado obispo de la diócesis de San José de Mayo, y es ordenado el 18 de marzo de 1984 por el nuncio apostólico Franco Brambilla. En su diócesis promovió la creación de Encuentro FM, emisora de radio católica”, expresa un pasaje de su biografía también publicada por la diócesis de San José.
Galimberti también llegó a ser presidente de la CEU (2004-2006). Pero también co-presidente de la Confraternidad Judeo-Cristiana de Uruguay y hasta ha ocupado cargos en el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam).
“Los caminos de Dios te sorprenden”
Finalmente, Antúnez. “Primero no lo esperas, son los caminos de Dios que te sorprenden, las visitas de Dios que te llegan bajo forma de desafíos, nuevas misiones”, había declarado en diálogo con Aleteia. Esas palabras las pronunció cuando se conoció su nombramiento como titular de la diócesis de San José en 2021.
En ese entonces su nombre también generó sorpresa. Pero no solo por su edad (tenía 52 años), sino por su nacionalidad y cercanía con el papa Francisco (ambos argentinos).
Según una reseña difundida por la propia diócesis de Salto, fue ordenado sacerdote en Montevideo, el 29 de julio de 2006. Realizó su profesión solemne como religioso jesuita el 12 de marzo de 2015. En 1992 se recibió de abogado en Argentina. Posteriormente cursó sus estudios de filosofía en el marco de su formación religiosa. Con el paso de los años, además del cariño que se ha ganado en instituciones educativas como el Colegio Seminario (fue rector), se transformó en el quinto obispo de San José de Mayo (puedes conocer más sobre su vida aquí).
