En Francia, dos tercios de la población infantil recibe los cuidados de sus abuelos de forma regular, ya sea durante las vacaciones, los días sin clase o las excursiones organizadas por el colegio, de acuerdo con un estudio de la DREES (Dirección de Investigación, Estudios y Estadísticas de la administración central francesa de los ministerios sanitarios y sociales).
Se trata de una conclusión que ya aparecía en un estudio de 2014 denominado Share sobre los abuelos en Europa.
En este último se demostraba que el 7 % de los abuelos franceses cuidaba diariamente de los nietos, y la mitad los atendía cuando surgía algún imprevisto (enfermedad, guardería cerrada, ausencia de la niñera, etc.) o durante las vacaciones escolares.
Pero hay una buena noticia para aquellos abuelos sacrificados: cuidar de forma regular de los nietos permite disfrutar de una vida más larga.
Según el Berlin Aging Study, un estudio acerca del envejecimiento en Berlín que ha recopilado los datos de 500 personas mayores, el cuidado de los niños mejora las funciones cognitivas, disminuye el riesgo de desarrollar Alzheimer y reduce el estrés.
De este modo, las personas de edad avanzada pueden estar más activas y estimuladas por probar cosas nuevas, además del trabajo de memoria que realizan al compartir los recuerdos.
Por supuesto, se trata de encontrar un equilibrio justo y sano. El efecto positivo del cuidado de los nietos puede verse reducido en caso de cansancio o agotamiento. Así que, si los abuelos cuidan de los nietos, ¡los padres tienen que cuidar de los abuelos!
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