Desafiando las normas no escritas en México sobre la separación Iglesia-Estado y sobre la (supuesta) imposibilidad de que los sacerdotes opinen de política y “se metan” en ella, los obispos mexicanos han entrado de lleno en el apoyo de organizaciones ciudadanas para exigir que los funcionarios públicos sean honestos.
Como consecuencia del pedido que hizo en Morelia el papa Francisco a los sacerdotes, religiosos, religiosas y seminaristas, de no caer en la tentación de resignarse ante la realidad y no atrincherarse en las seguridades ni en sus sacristías, la Comisión Episcopal para la Pastoral Social decidió sumarse al esfuerzo de un grupo diverso de ciudadanos y organizaciones de la sociedad civil, quienes han trabajado en una iniciativa para crear la Ley General de Responsabilidades Administrativas, denominada Iniciativa Ciudadana de Ley “3 de 3”.
En esta iniciativa se establece la obligación de todos los funcionarios gubernamentales de hacer públicas tres declaraciones: declaración patrimonial, declaración de intereses y declaración fiscal.
Además, la iniciativa define reglas claras de conducta para los servidores públicos y actores privados, así como sanciones para los corruptos.
“Son necesarias 120.000 firmas para presentar dicha iniciativa en el Congreso para su discusión; las firmas tienen que ser físicas, venir en tinta en un formato establecido y cumplir con una serie de requisitos que el Instituto Nacional Electoral validará”, han dicho en un comunicado José Leopoldo González, obispo de Nogales y responsable de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS) y Ramón Castro, obispo de Cuernavaca y responsable de la Dimensión Justicia Paz y Reconciliación, Fe y Política
Los prelados han invitado a todos los católicos de México a sumarse a esta campaña, misma que se puede consultar en www.ley3de3.mx.
Por lo demás, las firmas se pueden llevar a alguno de los 187 puntos de entrega establecidos, los cuales también aparecen en la página antes señalada, o bien enviarlos a CEPS a la Dimensión de Justicia, Paz y Reconciliación, Fe y Política, quien se ha comprometido a conjuntar el mayor número de firmas.
“Estamos convencidos de que es importante sumarnos para canalizar el hartazgo y frustración con la corrupción que vive México en una acción concreta que ayude a cambiar la situación actual”, dicen los obispos de México, quienes han deseado que la “invitación tenga eco favorable en sus corazones y organizaciones para ser “evangelizadores con y desde lo social”.
